Si bien aún ocupa un "lugar central" en la escena de la información digital, Twitter llega a su décimo cumpleaños presionada por inversores descontentos, un negocio que no termina de explotar y el reto de definir en este 2016 su fondo y su forma. Muchos son los intentos actuales del pajarito para mantener y captar nuevos usuarios. Jack Dorsey asumió las riendas de la compañía a mediados del año pasado tras haber sido expulsado del cargo de consejero delegado en el 2008 con el objetivo de encaminar este problema.
"Somos conscientes de que aún hay gente a la que Twitter le resulta complicado (...) Nuestra misión es conseguir que sea más sencillo para los nuevos a la vez que cuidamos a nuestros usuarios más entregados", explicó el vicepresidente de ventas de la compañía en Europa, Bruce Daisley.
Entre las modificaciones para sobrevivir al tirano contexto, Twitter reemplazó el "Favorito" por el corazoncito explosivo del "Me gusta", las citas dejaron de restar caracteres y, desaparecerá su cronología. Los cambios amenazan con hacerle perder su personalidad y su impronta. Sólo quiero decir que, no quiero vivir en un mundo donde Twitter permita más de 140 caracteres...
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